Así como hay muchas subespecialidades en el campo de la medicina, también las hay en el campo de la fisioterapia. Verá fisioterapeutas trabajando en todo tipo de entornos de atención médica en todos los grupos de edad, desde el hospital hasta las escuelas, clínicas privadas e incluso en su hogar. En la medicina ortopédica específicamente, la fisioterapia es un componente particularmente integrado en su atención.
Los fisioterapeutas son especialmente adecuados para guiarlo a través de la recuperación ortopédica porque gran parte del tratamiento tiene como objetivo «reequilibrar» su sistema musculoesquelético para realizar mejor las funciones que le importan.
La fisioterapia como profesión es responsable de restaurar la función y mejorar la calidad de vida de los pacientes en el hogar y la comunidad.
La medicina ortopédica aborda problemas relacionados con el sistema musculoesquelético (es decir, huesos, músculos, articulaciones, ligamentos y tendones). Estos problemas suelen ser traumáticos, degenerativos o relacionados con el uso excesivo, entre otras cosas.
Los enfoques de tratamiento en medicina ortopédica incluyen tanto el manejo conservador, que incluye: medicamentos, inyecciones, entablillado y terapia física u ocupacional, como también soluciones más invasivas como la cirugía.
Cuando se trata de lesiones ortopédicas, la fisioterapia puede desempeñar un papel clave tanto en el tratamiento conservador como en el posoperatorio para facilitar la recuperación y mejorar la función.
Cuando los pacientes experimentan una lesión ortopédica, se interrumpen elementos clave de su sistema musculoesquelético, lo que puede provocar dolor y, en última instancia, limitar la capacidad de una persona para realizar incluso las tareas diarias básicas.
En ausencia de una emergencia médica y dependiendo de la naturaleza del problema, su médico ortopédico puede recomendar sesiones de fisioterapia como una opción de tratamiento temprano. Su fisioterapeuta realizará una evaluación integral, obteniendo información más detallada sobre la causa subyacente exacta de su queja actual.
La evaluación consiste en tomar medidas como rango de movimiento, fuerza, equilibrio, pruebas clínicas específicas, palpar (evaluar mediante el tacto) las estructuras musculoesqueléticas, evaluar la postura y observar cómo se mueve. También es importante escuchar, en sus palabras, la naturaleza del problema y cómo afecta su vida diaria.
Luego, su fisioterapeuta desarrollará un plan de tratamiento basado en estos hallazgos. Los tratamientos generalmente consisten en corregir los déficits identificados durante la evaluación inicial y se modifican en función de sus respuestas posteriores. Por lo general, consistirán en ejercicios específicos, tratamientos manuales prácticos y medios para controlar la inflamación y el dolor. Esencialmente, su fisioterapeuta está tratando de volver a entrenar su cuerpo para que funcione mejor para usted.
Como tal, los objetivos establecidos por su fisioterapeuta siempre estarán relacionados con una tarea funcional diaria específica que haya identificado como limitada con la expectativa de que, al cumplir estos objetivos, podrá notar una mejora en la capacidad para realizar esas tareas.
La fisioterapia se interrumpirá cuando
- a) se hayan cumplido sus objetivos;
- b) ha alcanzado una meseta o mejoría médica máxima; o
- c) su condición no mejora.
Por lo general, volverá a ver a su ortopedista después de terminar el tratamiento, donde se pueden desarrollar planes de atención adicionales.
Para los pacientes que se someten a una cirugía ortopédica, es muy probable que la fisioterapia sea parte de su recuperación postoperatoria por las razones anteriores. Una vez que su cirujano ortopédico haya «solucionado» su problema, deberá volver a enseñarle a su cuerpo cómo moverse y restaurar la función de manera segura.
Su fisioterapeuta trabaja en estrecha colaboración con su cirujano para asegurarse de que esté progresando como se esperaba y protegiendo el proceso de curación, avanzando su protocolo de rehabilitación y sus actividades diarias de manera adecuada.
Como puede ver, la fisioterapia es a menudo un componente vital del manejo de la atención ortopédica, tanto para las necesidades conservadoras como para la recuperación posoperatoria. Su fisioterapeuta y su médico ortopédico trabajan en estrecha colaboración para ayudarlo a recuperar una mejor calidad de vida.
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